Tecnología, deuda y competitividad. La industrialización, contrabando, la competitividad y el empleo constituyen una paradoja.

¿Qué se entiende por contrabando?, que es un problema, que se puede paliar con tecnología y competitividad (soja, biodiesel, arroz, trigo, carne, entre otros). La introducción de bienes al país sin cumplir los requisitos legales. Pero la pregunta más básica es ¿por qué se traen bienes al país? La respuesta obvia es porque no hay producción nacional o la misma no es suficiente para satisfacer la demanda. (Industrialización utilizando la tecnología).

Tecnología, deuda y competitividad.  Si no hay producción nacional de un bien, y tambien que no sea competitivo, no queda otra alternativa que comprarlo en el exterior y traerlo al país en forma legal o de contrabando. Cuando se trae algo que no se produce en el país, el incentivo para introducirlo en forma ilegal es evitar el pago del arancel y los trámites de despacho aduanero y otros relacionados con la protección de la salud y del medio ambiente.

Cuanto más elevado es el arancel y más engorroso el trámite, mayor es el incentivo para traerlo de contrabando. De esto se infiere que si se quiere disminuir el contrabando hay que bajar el arancel, facilitar los trámites y nuestros productos deben ser competitivos.

Se debe recordar que los trámites de despacho de aduana y el cumplimiento de los demás requisitos implica un costo adicional al del arancel. Cuanto más tiempo lleva el despacho, mayor es el costo de tener la mercadería en los depósitos de aduana. Además, está el costo financiero de tener la mercadería varada. Si además de lo mencionado, es necesario obtener permiso de importación, eso añade al costo. También quien trae algo legalmente debe pagar IVA. Todos estos costos se evitan mediante el contrabando.

Cuando se exigen licencias especiales para la importación, el costo aumenta, a veces ese costo proviene de la necesidad de coimear. Estos trámites y aranceles deben solucionarse con TECNOLOGÍA, y que los funcionarios de aduana, no toquen físicamente dinero de los ingresos fiscales. Que los importadores depositen los aranceles, tasas, entre otros, directamente al sistema financiero.

Pero ¿qué pasa cuando el bien en cuestión se produce en nuestro país y lo que entra de contrabando compite con el producto nacional? En este caso varios factores entran a jugar para incentivar el contrabando. El principal es el sobreendeudamiento de los países(que para pagar los intereses de la deuda, suben todos los impuestos),  esto hace  la diferencia de precio entre el producto nacional y el extranjero. Otro factor es la diferencia de calidad. Un tercer factor es la disponibilidad del producto y la facilidad para comprarlo cuando se lo necesita, sin tener que esperar días, semanas o meses para la entrega. Viene a la mente el caso del cemento que, por falta de producción nacional suficiente, en los últimos diez años, comenzó a importarse. Lo notable es que a pesar del flete el producto importado que entraba legal o ilegalmente salía más barato o tenía el mismo precio que el de producción nacional. Y aquí entra a jugar la competitividad del productor nacional.

Un producto es competitivo si el precio de venta y la calidad son iguales o mejores que la del producto extranjero. El precio de venta depende del costo de producción, y el costo de producción, a su vez, depende de la productividad de la mano de obra y del costo de los demás factores de la producción, es decir del capital físico y de la tierra o de las condiciones de la naturaleza. Ahora bien, lo que más contribuye a mejorar la productividad de la mano de obra es la utilización de herramientas y tecnología modernas.

Como ejemplo comparemos la productividad de un agricultor que utiliza un arado tirado por bueyes con la de uno que usa un tractor. Es inevitable que se abran paso nuevas modalidades en la producción de bienes y servicios, si ellas satisfacen en mejores condiciones los requerimientos de la demanda.

Por lo demás, esos avances, que no solo mejoran la calidad de la oferta, sino que también favorecen el bolsillo del consumidor final, antes que crear desocupación, terminan generando nuevos empleos, en reemplazo de los que se volvieron obsoletos.

Evidentemente la productividad del agricultor que trabaja con un tractor va a ser mayor. Sin embargo, la introducción de tecnología moderna desplaza mano de obra. Y esto hace que nuestro país con abundante mano de obra se encuentre ante una paradoja. Se tiene que tener una Ley del primer empleo, Ley. 100 % retorno, del salario de 10 empleados en un año- de manera que con esta ley los industriales, empresarios, entre otros, al contratar más de 50 empleados, el Estado le devuelva 100% de retorno del salario de un año, de 10 empleados (de los contratados de 50, 100……) de los contratados como empleos por primera vez. Desde luego hay que poner un techo, para los empleadores del primer empleo.

¿En qué consiste la paradoja? Pues en que uno de los objetivos del nuevo gobierno, que va asumir el 15 de agosto del corriente año. Es reformar la política fiscal deficitaria (no cubrir los agujeros negros fiscales con más deudas). Es crear puestos de trabajo (con esta ley del primer empleo) y otro es disminuir el contrabando (con tecnología). Ahora bien, para disminuir el contrabando hay que aumentar la productividad, (no aumentar los impuestos),  también la utilización de tecnología moderna requiere menos mano de obra.

En los países avanzados que producen tecnología moderna la demanda de mano de obra no calificada disminuye y la de trabajadores altamente preparados, como, por ejemplo, la de ingenieros, científicos, y técnicos, aumenta. En nuestro país que no produce tractores, ni computadoras, ni otro tipo de maquinarias, la mano de obra desplazada no tiene adonde ir, excepto a países extranjeros donde la población de gente joven es insuficiente para atender las necesidades de una creciente población de gente de la tercera edad.

El propósito de estas reflexiones no es justificar el contrabando sino señalar que el problema del contrabando está vinculado al de la competitividad, y también al endeudamiento de los países, causa que los Gobiernos gasten más de lo que ingresan debido al pago de intereses; estos intereses de los servicios de la deuda engrosan los gastos rígidos dentro del presupuesto, y estos hacen más pesada mantener el estado. A la larga, el Gobierno tiene que dedicar una gran cantidad de recursos en imponer impuestos, para obtener más dinero el estado, para los pagos del servicio de las deudas. Estos aumentan los costos de la producción y esta mala política fiscal hace que los productos sean menos competitivos.

Cuando los niveles de deuda de un país son muy altos, habitualmente se asocia con un crecimiento económico más lento y menos competitivo, en comparación a periodos en los que la deuda del país es menor. (relación entre deuda y crecimiento económico). Las deudas de los países influyen mucho en la competitividad y que ambos, a su vez, ejercen su efecto sobre la demanda de mano de obra.

Por tanto, estos problemas deben ser planteados en forma conjunta y no aislada.

De las mismas se puede colegir que el problema de la deuda, (de pagar deudas con deudas), del contrabando no es tan sencillo y que para su disminución no va a ser suficiente mejorar los controles aduaneros, ya que cuando la diferencia de precios entre los productos nacionales(a causa de mayor costo de la producción), y los del exterior es grande la gente se va ingeniar para burlar los controles por rigurosos que sean.

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