Un nuevo modelo de PGN: Con esta nueva herramienta el PARAGUAY QUE QUEREMOS va a resolver, hacer y construir cosas concretas. Y con este nuevo modelo del Presupuesto Nacional, vamos a tener un Desarrollismo moderno del siglo XXI”.

Receta del pasado.  Para el futuro del Paraguay que queremos. No está en las recetas del pasado, que es el viejo modelo del Plan de Gastos de la Nación (PGN), corrupta, prebendarías y clientelistas.

Pésima calidad de gastos públicos. Muchas obras públicas siguen paradas por falta de recursos. La política fiscal, por su lado, sin rumbo, sin atacar las causas verdaderas del problema como la pésima calidad del gasto público, sin presentar propuestas para una verdadera reforma del Presupuesto General de la Nación, (PGN), que sigue siendo una máquina de generar pobreza con una enorme concentración de los ingresos tributarios en gastos superfluos o gastos corrientes, dejando una casi nula financiación para los gastos en inversión. (El país no le queda otra opción que emitir “BONOS SOBERANOS”, para pagar los servicios de nuestra deuda, gastos sociales, infraestructura, seguridad, educación, salud, entre otros).

Esclavizados a la deuda. Tenemos un sistema de “neo-feudalismo” en el cual todos nuestros gobiernos están esclavizados a la deuda. Este sistema es gobernado por los bancos centrales y por el Banco de Pagos Internacionales, y sistemáticamente transfiere las riquezas del mundo fuera de nuestras manos hacia las manos de la élite mundial.

topear los gastos corrientes. Se debe modificar la Constitución, con una enmienda constitucional, dar un corsé o tope para el Presupuesto General de Gastos de la Nación (PGN), de tal forma que el 60% sea para Gastos de capital y 40% para Gastos corrientes (prescribir con rango Constitucional, como si se tratara de un corsé o tope para que el Presupuesto General de Gastos de la Nación (PGN) no siga siendo un festín de los Poderes Políticos).

reducción drástica de gastos corrientes. En este sentido hacer cambios en la administración del Presupuesto General de la Nación, en todas las entidades centralizada y descentralizadas del país y

el principal es la eliminación de los “factores hipócritas” donde

las leyes insisten en ver el lado teórico, y no

las consecuencias prácticas y reales y con darle una figura constitucional al PGN, va a haber cambios drásticos en los puntos de vista actuales, especialmente en la reducción drástica del gasto corriente (sueldos y otros beneficios).

60% para gastos de capital. En ese sentido las Instituciones públicas Centralizadas y Descentralizadas llámese:  El Poder Ejecutivo, Poder Judicial, y el Poder Legislativo, deberían tener un modelo del Plan de Gastos de cada institución 60% para gastos de capital (Infraestructura, seguridad, educación, gastos sociales y para pagar los intereses de nuestra deuda, entre otros) y 40% para gastos corrientes (sueldos y otros beneficios.

Nuestro país tiene un potencial de desarrollo y ha sufrido una parálisis muy preocupante en las inversiones públicas en las últimas décadas. Este es un hecho probado.

este modelo de presupuesto fracasado. Faltan más inversiones en infraestructura, educación, cultura, y prácticamente en todas las áreas relacionadas con el estado, lo que ha dificultado el crecimiento de nuestro país y continuará dificultándolo, por lo menos por otras décadas, si no adoptamos una posición firme en este momento.

Esto se reflejará de inmediato en la seguridad pública del país y la sociedad, en materia de infraestructura, seguridad, salud, educación, entre otros.

tasa más alta de corrupción. En el largo plazo esto también se reflejará en la cultura y el comportamiento de los funcionarios que manejan la cosa pública. Es terrible saber que nuestro país tiene la tasa más alta de corrupción en el mundo, muy cerca de Nigeria.

políticos corruptos. Nuestro país no castiga como debe ser a los administradores de la cosa pública (políticos corruptos), principalmente, a los del régimen de turno y por eso es que no hay altos burócratas arrestados por este flagelo, que diezma las arcas públicas.

nuevos tiempos. Los “nuevos vientos de cambio para vencer la injusticia” que estarían soplando, aludiendo a ciertas intervenciones fiscales, judiciales y políticas que, a partir del último 15 de agosto, han afectado a algunos capitostes de antes y de ahora. Parece claro que, en cierta medida, el Ministerio Público y algunos jueces se han vuelto de pronto más diligentes a la hora de cumplir con sus respectivas funciones.

caiga quien caiga. Ahora bien, es de esperar que los “nuevos vientos” como dice el Presidente Mari Abdo, “caiga quien Caiga”. La ciudadanía honesta cree sentir soplen realmente en todas las direcciones con la misma fuerza, y no solamente hacia sectores que están “molestando” a los nuevos dueños del poder, para que quienes caigan en desgracia sean utilizados como “chivos expiatorios” y así dar a la ciudadanía la impresión de que se están combatiendo con energía la delincuencia y la corrupción.

Por lo tanto, está claro por qué esta plaga (la corrupción) es cada vez peor en nuestro país, con una voluntad política se deben tomar medidas para frenarla.

Como dijo alguien, muy acertadamente, en nuestro país no hay razones para no robar.

un nuevo modelo del presupuesto nacional. Un país que quiere crecer debe producir los mejores profesionales del mundo y esto sólo es posible, con un nuevo modelo del PGN, si el estado invierte por lo menos cinco veces más de lo que se hace ahora en educación, de lo contrario el país se quedará estancado y no formará el talento que tiene y que podrían ser grandes profesionales.

recurso humano. Si no se capacita de verdad, verdad a nuestro recurso humano, este perderá la competividad en el mercado de trabajo por falta de preparación El proyecto del PGN 2019 asciende a Hasta el momento, con los cambios aprobados ayer, el plan de gastos total quedó en G. 80,17 billones (USD 13.521 millones), lo que significa un incremento de G. 118.000 millones (USD 20 millones) con respecto a la versión Diputados.

Con este modelo del Presupuesto Nacional (PGN) se aprueban aumentos de salarios “sin financiamiento”.

Senado “valea” a cuenta de la reforma tributaria

vaca lechera. Proyecto de Presupuesto 2019 vuelve a Diputados con múltiples “salariazos” directos o camuflados. Elevaron del 13 al 16% el ajuste docente y otorgaron incrementos a fiscalía, Poder Judicial y otros. No hay recursos, pero con este modelo de Presupuesto Nacional de Gastos de la Nación (PGN), corrupto, prebendario y clientelistas, que les permiten a los políticos de negocios, a los congresistas, a utilizar el presupuesto nacional como una “Vaca lechera” (este modelo de PGN no tiene límite los gastos corrientes) para gastar contra una posible suba de impuestos que aún no ha sido acordada. (Solo un día después de la promesa de que cualquier mejora fiscal se blindaría y no iría a gastos corrientes).

60% para gastos de capital. Con esta nueva reforma del Presupuesto Nacional. 60% para gastos de capital, ya los políticos de negocios y los congresistas, no podrán hacer vito del dinero del pueblo.  Además, este nuevo modelo de presupuesto nacional, no va a permitir reducir la carga tributaria, los países serios, han demostrado que el crecimiento del país no requiere perseguir a sus industrias y empresas en general; por el contrario, el Estado tiene que ser un aliado y no un enemigo de los negocios, después de todo, es del trabajo de estas empresas que el país obtiene su sustento para crecer y garantizarle la calidad de vida a sus ciudadanos.

nuevo modelo de PGN. Con esta nueva herramienta el PARAGUAY QUE QUEREMOS va a resolver, hacer y construir cosas concretas. Y con este nuevo modelo del PGN vamos a tener un Desarrollismo moderno del siglo XXI”, Para el futuro del Paraguay que queremos. No está en las recetas del pasado, que es el viejo modelo del Plan de Gastos de la Nación corrupta y prebendarías.

transparencia en la administración. Con esta nueva herramienta de un nuevo modelo del Plan de gastos de la Nación, acompañado de la Ley de Transparencia de la Administración, se va a resolver en gran parte el control del dinero del pueblo.

Con este viejo modelo del PGN corrupto, clientelistas y prebendaría, da lugar al pobre manejo de las finanzas públicas por la clase política criolla esta llevado al país a una crisis financiera sin precedentes. Frente a esta situación, se hace evidente la urgente necesidad de reformar la administración pública y adoptar medidas que mejoren el ejercicio fiscal en el país.

Un nuevo modelo del Plan de gastos de la Nación para la República del Paraguay debe enfrentar los problemas de discrecionalidad en el gasto público, falta de rendición de cuentas, ausencia de criterios de evaluación y otras trabas que frenan el manejo fiscal responsable en el país.

transparencia presupuestaria. Es un instrumento que debe hacer énfasis en la transparencia presupuestaria, la aclaración de los objetivos de política fiscal, y la periodicidad y contenido de las estadísticas fiscales. Todos estos elementos son iniciativas de gran impacto sobre el panorama fiscal del país, y que ayudarían a garantizar la ejecución y el mantenimiento de políticas fiscales sanas y sostenibles en el largo plazo.

los males del Paraguay. Las líneas maestras de un programa político para ´´curar´´ los males de Paraguay y sacar al país de su estancamiento económico y declive político. Son planes expuestos que parten de diagnosticar el gasto público como el ´´núcleo´´ de los «males» de Paraguay. Y que proponen una reforma de la Constitución a través de una enmienda para fijar un tope en el gasto público y sanear la Administración. Cambios de profundidad.

topear lo gastos públicos. ´´El núcleo de los males de Paraguay es el gasto público. El gasto crea déficit. El déficit crea deuda. Si bloqueamos el gasto, bloquearemos el problema de fondo. Propongo que, en un plazo de cinco años, se prohíba al gobierno dedicar más del 60% para gastos corrientes del PGN. Y también sería interesante de que los gastos públicos no pasen más del 50% del PIB. Cualquier gobierno que llegue a estos techos se enfrentaría a la prohibición constitucional de aumentar los gastos corrientes, la deuda o los impuestos. De ese modo, solo habría una solución: ahorrar´´.

La carga fiscal en nuestro país, especialmente para los consumidores (impuestos regresivos) es exagerada, confiscatoria, injusta y desordenada y si no hay un cambio drástico, el mercado interno también se estancará y las empresas no podrán competir en los mercados internacionales.

burocracia pesada. Los últimos veinte presupuestos generales anteriores consisten en sacar dinero a la gente que trabaja para entregárselo a la burocracia, sin que en parte alguna del camino se cumpla las obligaciones del Estado hacia quienes lo sostienen.

burocracia más cara del mundo. Con este modelo de PGN el 85% es para gastos corriente, nuestro país tiene la burocracia (política) más cara del mundo, esto ocurre por la cultura del malandraje instalada y por la falta de políticas serias y claras en materia salarial.

Es necesario que el político entienda que es un funcionario público, como cualquier otro, con una obligación de entregar su trabajo y sus conocimientos en beneficio de su país y no un “rey” como se ven actualmente.

La Constitución y las leyes tienen que establecer un tope al Presupuesto General del Gastos de la Nación, y también en cuanto a salarios que sean compatible con los otros funcionarios públicos y a partir de ahí, regirse por los aumentos en el sueldo mínimo del país. Este desastre que existe en nuestro país con el manejo del dinero público, Itaipu, Yacyreta, entre otros, con el abuso de los mega salarios, sin corresponderse con la productividad ni menos con las soluciones para el pueblo, causa todavía más prejuicios al estado, pues un pueblo que se siente robado por sus líderes políticos pierde la percepción de lo que es correcto, justo, honesto y honorable.

INVERTIR FUERTEMENTE EN EL CAMBIO DE LA CULTURA DEL PUEBLO

La gran masa de nuestro pueblo ya no cree en el gobierno, ni en su política, no respetan las instituciones, no cree en sus leyes, ni en su propia cultura, se acostumbró al desorden gubernamental y pasó a ver como normal las noticias trágicas sobre la corrupción, violencia, deterioro de los servicios públicos, etc.

Por lo tanto, se necesita invertir en la correcta formación cultural del pueblo, a partir de las escuelas, empresas, iglesias, instituciones públicas y así sucesivamente, comenzando con la educación para el trabajo y la búsqueda de la excelencia en un mundo globalizado, enseñando al pueblo a amar y honrar a su país; si no, es inevitable que, a largo plazo, comiencen a emerger milicias armadas en busca de espacio y poder paralelo al gobierno.

INVERTIR EN CIENCIA Y TECNOLOGÍA

Los países grande y poderoso invierten en ciencia y tecnología. Este debe ser una política de estado, para crecer y a mostrarse al mundo como un país de oportunidades y tener la calidad requerida en el área de ingeniería, calidad médica, tecnología de calidad, no contar con profesionales con una formación de calidad para competir con los países desarrollados que van más de 50 años por delante de Paraguay. Esta es una realidad y debe ser revisada de inmediato, ya que influye directamente en el desarrollo de cada nación.

Que este problema de falta de recursos humanos para crecer y a mostrarse al mundo como un país de oportunidades, no debe ser un tema desconocido por parte de las actuales autoridades, la pregunta es: qué se está haciendo para cambiar esta situación y en qué tiempo se debería esperar una transformación para pasar mucho más rápido del discurso a las obras.

Solo el prestigio del gobierno permitirá que la ciudadanía apruebe cambios en nuestra Carta Magna, con una enmienda constitucional entre los que debiera incorporarse el principio de aplicación de solo un 60% de los recursos a gastos de capital y 40% de gastos corrientes, para todas las entidades Centralizada y Descentralizadas.

Este es el Paraguay que queremos.

 

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